“Ships at a distance have every man's wish on board. For some they come in with the tide. For others they sail forever on the horizon, never out of sight, never landing until the Watcher turns his eyes away in resignation, his dreams mocked to death by Time. That is the life of men.
Now, women forget all those things they don't want to remember, and remember everything they don't want to forget. The dream is the truth. Then they act and do things accordingly.”
La traducción vendría ser algo así como:
“Los barcos a cierta distancia llevan abordo todos los deseos que pueda tener cualquier hombre. Para algunos vienen con la marea. Para otros navegan para siempre en el horizonte, jamás apartados de su mirada, jamás pisan tierra hasta que el Espectador retira su mirada en señal de resignación, sus sueños son burlados al caducar con el tiempo. Esa resulta ser la vida de los hombres.
Ahora, las mujeres olvidan todas esas cosas que no desean recordar, y recuerdan todas las que no desean olvidar. El sueño es la verdad. Entonces ellas actúan en consecuencia.”
“She’s gotta have it”, es un “slang” en inglés, el cual se refiere al carisma y al empuje que tiene un modelo determinado de mujer que, pudiendo inmolarse de por vida, escoge el camino más complicado de todos - remando siempre a la contra en busca de un objetivo que la complete de pies a cabeza.
Por otra parte, “empowered” es una palabra, en inglés, que, aunque su traducción literal sea la de “autorizado”, también puede traducirse como “habilitado.” Lo cierto es que también tienen esa connotación de “haber sido habilitado con ciertos poderes” para poder llevar a cabo eso que cada uno de nosotros desea conseguir. “Empowered” nos dignifica cuando se usa para calificarnos, porque denota que tenemos algo dentro de nosotros mismos que nos equipa para poder llevar a cabo tareas de un cierto riesgo, las cuales no resultan ser nada fáciles - siempre conllevan el tener que renunciar a algo.
A veces el sacrificio es mínimo con respecto a la recompensa, a veces el sacrificio es mayor que la recompensa; en cualquier caso, tal paso hacia delante nos obliga a batallar contra nuestros demonios internos. Dar el paso hacia adelante y ganar esta primera batalla no quiere decir que hayamos ganado la guerra, pero ¿quien ha dicho que las guerras se ganan cuando nos quedamos quietos? ¿Cuantas cosas no habremos soñado hacer y siempre se dejan aparcadas en un rinconcito de nuestro micro universo? Lo peor de todo es que nunca podremos saber si pudimos llevarlas a cabo o no, porque jamás tuvimos el coraje de sacrificar algo, para obtenerlo. ¿Por qué nos cuesta tanto dejar lo que tenemos para intentar materializar nuestro sueño?